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CAMBIO DE AUTORIDADES DE LA COMISIÓN PRO BONO: MOMENTO PARA EL BALANCE, ENTREVISTA AL DR. MARTÍN ZAPIOLA GUERRICO
Autor: María de la Paz Miatello |
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con necesidades legales insatisfechas y necesidad de trabajo profesional gratuito. Me pareció, por tanto, que era viable replicar el modelo”. Martín Zapiola Guerrico no fue el único en empezar a pensar en la posibilidad de un cambio. Muchos socios y abogados de estudios jurídicos, presentes en aquella primera conferencia, empezaron a entusiasmarse con lo mismo.
Tras esa visita en el año 2000 surgió la idea de hacer el Primer Seminario Internacional de Trabajo Pro Bono, en Buenos Aires, en septiembre de 2001. Pero días antes de la fecha fijada para el evento, tuvo lugar el brutal atentado a las Torres Gemelas. “A pesar de la sensación apocalíptica total, muchos abogados neoyorkinos dijeron, “vamos igual”. Eso me impactó muchísimo. Venían acá, a 10.000 km de distancia y después de lo que les había tocado vivir, para hablar de este tema. “Algo importante debe haber atrás de todo esto”, pensaba, “alguna motivación muy fuerte”. Se decidió, entonces, seguir adelante, pero dividiendo el seminario en dos partes. Una primera parte de ONGs, en septiembre, y una segunda parte más amplia, con estudios, en noviembre. Pero en noviembre comenzaron las primeras manifestaciones del corralito financiero. “Empezaba a aparecer esa crisis económico-social-institucional fenomenal del 2001. Reinaba una sensación bastante caótica y movilizante al mismo tiempo. En diciembre de 2001, principios de 2002, uno veía escenas terribles: gente buscando comida entre la basura, los cartoneros en tu vereda... Y si bien sabemos que esa realidad no apareció ahí, fue ahí que se nos hizo inevitable y se volvió imposible mirar para un costado”.
Todos estos elementos confluyeron para terminar de despertar la atención de socios e integrantes de diferentes estudios jurídicos, y así se formó una especie de “mesa pro bono” integrada por varios socios de los principales estudios de Buenos Aires. “Nos reuníamos cada tanto para ver qué forma le dábamos a todo a esto. En un primer momento tuvimos que decidir si canalizábamos esta idea como parte de una comisión dentro del Colegio de Abogados o como una Fundación aparte del Colegio. A título personal me parecía que era una idea que le daba renovado sentido al Colegio como asociación profesional. Me parecía que era valioso que se canalizara dentro del Colegio porque iba a tener un efecto vivificante y |
