|
RUCCI, LARRABURE, VIOLA. VÍCTIMAS DEL TERRORISMO DE ESTADO Autor: Javier Vigo Leguizamón |
|
Había escuchado a Firmenich anunciar que no estaba dispuesto a abandonar las armas porque “el poder político brota de la boca del fusil” y que era necesario prepararse para el próximo e inevitable enfrentamiento. Le había oído imputarle que su ideología era contradictoria con la de los Montoneros, porque ellos querían la revolución violenta para imponer un régimen marxista- leninista y Perón era partidario de un cambio progresivo dentro del sistema. Entre el tiempo y la sangre, Perón elegía el tiempo.4
La gravedad de los hechos precipitaron la renuncia de Cámpora y, en septiembre de l973, Perón fue electo Presidente.
El plan criminal no se detuvo. Dos días después, los Montoneros tiraron un cadáver sobre la mesa de negociaciones: el de José Ignacio Rucci, probablemente, con la cooperación material del gobierno de la provincia de Buenos Aires, quien aportó la logística necesaria para la ejecución del crimen. Según la investigación llevada adelante por Ceferino Reato, el asesinato habría sido planificado por el principal asesor del gobernador de la provincia de Buenos Aires, Oscar Bidegain, y se transportaron en autos oficiales las armas necesarias.5
Tales sospechas son consolidadas por el discurso que Perón pronunciara en enero de l974, después de que el ERP atacara el Regimiento de Caballería de Azul, oportunidad en que exigió la renuncia del gobernador Bidegain denunciando que “hechos de esta naturaleza evidencian elocuentemente el grado de peligrosidad y audacia de los grupos terroristas que vienen operando en la provincia de Buenos Aires ante la evidente desaprensión de sus autoridades… No es por casualidad que estas acciones se produzcan en determinadas jurisdicciones. Es indudable que ello obedece a una impunidad en la que la desaprensión e incapacidad lo hacen posible, o lo que sería peor, si mediara, como se sospecha, una tolerancia culposa”.
3. Licastro, Julián: Mi encuentro con Perón. Memorias e ideales. Ed.Lumiere, pág.204
4. Reato, Ceferino; Operación Traviata, Pág 113/115/117
5. Reato, ob. cit, Pag 123 a 139: |