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LA INDEPENDENCIA JUDICIAL PROTEGE LOS DERECHOS DE LOS CIUDADANOS Autor: Patricio Petersen |
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De hecho, es de desear también que los juicios políticos funcionen con la misma independencia que deben tener los magistrados en sus cargos.
Además, también la Carta Magna nos habla de dos garantías centrales que aseguran esta independencia de los jueces: la inamovilidad en el cargo mientras dure su buena conducta y la intangibilidad de sus remuneraciones. Estas son dos garantías establecidas en el art. 110 de la Constitución Nacional en favor de los ciudadanos, verdaderos beneficiarios de la independencia judicial. No se trata de privilegios de los jueces, ni de un beneficio de carácter personal o patrimonial de los magistrados, sino de una condición de la imparcialidad del juicio y por ende un derecho de raigambre constitucional a favor de los justiciables.
El deber de imparcialidad obliga al juez a decidir los conflictos considerando a todos los ciudadanos iguales ante la ley, sea cual fuere su origen, ideas políticas, condición social o económica, religión, etc. El juez debe “ser” y “parecer” independiente ya que debe gozar de la confianza de la sociedad a cuyos integrantes juzgará. Y la confianza de la opinión pública es un bien muy preciado en las instituciones argentinas de hoy en día.
Desde hace tres años, el Foro de Estudios sobre la Administración de Justicia (Fores) junto con la Fundación Libertad y la Escuela de Derecho de la Universidad Torcuato Di Tella lleva a cabo una medición cuatrimestral de esa confianza en la Ciudad de Buenos Aires, el conurbano bonaerense, Córdoba, Rosario, Mendoza y Tucumán. La encuesta refleja la confianza que los ciudadanos tienen en el sistema de justicia.
La medición correspondiente al mes de marzo de 2007 demostró que uno de cada cuatro ciudadanos puesto frente a decidir entre recurrir a la justicia o perder su derecho, se inclinó por esta última opción. Por otra parte, solo el 13% de los encuestados manifestó que considera a la Justicia como confiable en su imparcialidad, mientras que el 83% considera a la Justicia como poco o nada confiable en esta cualidad. |