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Nuevos paradigmas sociales y derecho Autor: Mónica Catani |
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Y drásticamente contemplamos como otro sistema sustituye al sistema Constitucional respetado de 1853 (incluyendo las sucesivas modificaciones constitucionales). El ojo especializado puede advertir, que se encubre un verdadero reemplazo paradigmático.
La ruptura con las tradiciones nacionales, ha sido instalada. La confusión de lo público nacional, con lo político partidario, es hoy reivindicado bajo la nueva forma de legalidad de las mayorías electorales.
La “licuación” del ciudadano (aquella persona con pertenencia y lazos con su comunidad) de la que nos alerta Bauman, facilita esta drástica revolución jurídica. Los argentinos ocupados en sus caminos individuales, sin rumbos colectivos definidos, soportando las incertidumbres de la constante movilidad socio económica de la era posmoderna, somos materia fácil para disolver y mutar.
Bajo un relato de “democratización” (ideal que obviamente no merece cuestionamiento), se quiebran las instituciones que la contienen, y se tiranizan las ideas de los individuos, que perdieron el encuentro del debate y de la Política con mayúsculas.
Hablamos de derechos humanos y distribución de riquezas, con índices de pobreza cada vez mayores, que oscilan el 26,9% (según el Observatorio de la Deuda Social UCA), y que sin lugar a dudas hallamos en las calles de pueblos y ciudades a lo largo del país.
Se anuncia la transparencia en la gestión de gobierno, y un proyecto de ley prevé un anexo reservado en la declaración patrimonial de los funcionarios y sus familiares. ..
Mientras trabajamos en un nuevo código penal, la corrupción y la inseguridad de la población, con el avance de la delincuencia, no son materia de políticas de estado, y ni siquiera se incluyen en el relato oficial. La dicotomía entre “sensación” de inseguridad y la realidad aumenta, en julio de 2012 conocimos el triste ranking en el cual la Argentina tiene el promedio más alto de robos por habitantes, suministrador por el informe del Observatorio Hemisférico de la O.E.A.
Nada de esto es casual. El mundo gira alrededor de economías e instituciones jurídicas globalizadas. Sin embargo, en la Argentina tenemos individuos superados por la economía que ha globalizado su día a día (propio de la posmodernidad) y un derecho |